Ansioso, cansado, o incluso agresivo. Pero además de ello, la tripa comienza a rugirnos… Seguro que ya te ha pasado alguna vez, ¿no? De repente comienzas a cabrearte aparentemente sin razón alguna, así que te preguntas si realmente tener hambre estará produciendo que estés enfadado… Si quieres descubrir por qué estamos de mal humor cuando tenemos hambre, ¡Continúa leyendo!
¡Come para tener energía!
Nuestra alimentación está directamente relacionada con la obtención de energía de nuestro cuerpo. Es esta energía la que nos permite estar despiertos, poder pensar, movernos, crecer y, generalmente, hacer nuestra vida diariamente. Realmente, este energía proviene de los nutrientes que absorbemos y que se encuentran en los alimentos que comemos.
Cuando no hemos ingerido una cantidad suficiente de nutrientes, nuestro cuerpo comienza a tener una falta de energía, por lo que nos sentimos cansados, nos cuenta pensar, y también nos cuesta más controlar nuestras reacciones, debido a que la primera parte afectada por esto es nuestro cerebro.
Ahora mismamente debes estar pensando… pero, ¿por qué ocurre esto? Esto ocurre debido a que nuestro cuerpo libera sustancias neurotransmisoras las cuales producen sentimientos de bienestar y placer. Una de ellas (y muy importante) es la serotonina.
¿Qué es la serotonina?
La serotonina es un neurotransmisor esencial para nuestro cuerpo, el cual transporta la información entre neuronas, y también nos ayuda a regular nuestro temperamento. La serotonina desempeña importantes tareas en nuestro cuerpo, aunque probablemente una de las más importantes es la de controlar nuestros impulsos emocionales.
¿Qué pasa cuando tenemos hambre?
Cuando tenemos hambre, nuestro cerebro se ve afectado por las fluctuaciones de nuestros niveles de serotonina, de manera que tenemos mayores dificultades para realizar algunas tareas y movimientos, así como para controlar nuestras emociones y comportamiento. La razón de esto es que, cuando nuestros niveles de serotonina son bajos, la los canales comunicativos entre diferentes partes de nuestro cerebro se hace más estrecha, haciendo que la cantidad de información recibida sea menor en el mismo tiempo, y que, consecuentemente, nos sintamos cansados, irritables o enfadados de forma más fácil.
Así que… ¿Hay alguna truco? ¡Evita estar mucho tiempo sin comer! De acuerdo con algunos estudios, deberíamos picar algo cada 3 horas más o menos.
Curiosidades:
- Los alimentos que contienen grandes cantidades de azúcar, incrementan rápidamente nuestros niveles de glicemia, pero también los reduce rápidamente pasado un breve tiempo. Por ello, cuando comemos dulces, tenemos la sensación de que volvemos a tener hambre al poco rato.
- Hay algunos alimentos que pueden incrementar nuestros niveles de serotonina. Estos son: las nueces, los plátanos, el pollo, el queso y los huevos. La ingestión de algunos de estos alimentos está directamente relacionada con el bienestar.
- Hay 5 tipos diferentes de nutrientes que necesitamos diariamente: vitamina D, magnesio, potasio, yodo y vitamina B12.
¿Sigues pensando lo mismo? ¿Crees que el hambre puede provocarnos enfado e irritabilidad? Por supuesto que si, ¡pero ahora ya sabes como evitarlo! Así que para ello deberías aprender a cocinar deliciosos platos que llenen tu barriga y te hagan estar feliz. Para ello te recomendamos que eches un vistazo a nuestra página web, donde podrás encontrar divertidos kits con los que aprender ciencia mientras cocinas tus propios chocolates, yogures, helados, cupcakes, golosinas ¡y mucho más!